Gloria Romero y Baptista, ambición y chapulineo.

Como sucede cada campaña política, los candidatos a diputados prometen en sus recorridos regresar a sus distritos para agradecer el voto de confianza y refrendar compromisos con sus votantes, sin embargo esto es casi imposible en una clase política que únicamente utiliza el proselitismo como un trampolín político y económico.

Tal es el caso de los diputados hidalguenses Gloria Romero León y Ricardo Baptista González, reconocidos en la escena política local por brincar de un cargo a otro o solicitar licencia a sus cargos según sus intereses personales.

En el caso de la diputada federal Gloria Romero León del Partido Acción Nacional, desde el año 2000 siendo esposa de José Antonio Tellería Beltrán + ha acomodado las piezas a modo de mantenerse vigente en la vida política, más no pública pues los votantes desconocen de su desempeño y ha pasado casi desapercibida en los espacios públicos que ha ocupado.

En 2012 cuando también ocupaba un curul plurinominal solicitó licencia al Congreso Federal para contender por la Alcaldía de Pachuca ante el priísta Eleazar García, donde lógicamente y con un desempeño gris en San Lázaro fue derrotada en las urnas de la bella airosa, permitiendo a su suplente Horacio Ramírez ocupar el curul por únicamente por 3 meses.

En 2018 ocupando la diputación local del distrito XII de Pachuca, Romero solicitó licencia para contender nuevamente por una diputación federal, aunque sus relaciones con el Comité Ejecutivo Nacional del PAN ya la habían designado como diputada de representación proporcional; es decir era un trámite innecesario hacer campaña cuando ya tenía asegurado su curul.

Desde luego que la viuda de Tellería fue derrotada en las urnas permitiendo a su suplente Sonia Cristina López ocupar el cargo por 3 meses; para después reincorporarse a la nómina del Congreso del Estado de Hidalgo por 59 días y pidiendo licencia nuevamente para tomar protesta en San Lázaro.

Dicen en los pasillos del PAN Hidalgo que Gloria Romero ya contempla su salida de las filas albiazules para sumarse a Movimiento Ciudadano y hacer fórmula para el Senado en 2024 al lado de su ex colaborador y actual presidente del MC, Arturo Gómez López, quién en dos ocasiones ha sido derrotado en las urnas, al igual que Romero, ojalá lo tomen en cuenta sus asesores.

En el caso del diputado local Ricardo Baptista , nuevamente solicitó licencia por tiempo indefinido a su curul en el Congreso del Estado de Hidalgo; pues a partir de mañana asumirá una regiduría de representación proporcional en Tula de Allende.

Anteriormente el diputado morenista e integrante de Grupo Universidad presentó solicitudes de licencia el 5 de marzo y el 19 de agosto para contender por la alcaldía de Tula.

Al parecer los diputados olvidan la ética y tienen muy presente las matemáticas durante sus respectivas gestiones; no desaprovechan un sólo día para cobrar del erario aunque su trabajo legislativo deje mucho que desear.